Las sesiones smash cake son un poco impredecibles, normalmente suelen ser muy divertidas pero en algunas ocasiones algún peque se sorprende por la situación y no acaba de soltarse del todo.
Por eso es importante crear un ambiente divertido y distraído para que el niño vaya cogiendo confianza poco a poco y se deje llevar.
Pero este no fué el caso de Roc, el llegó al estudio muy contento y alegre y así transcurrió su sesión de cumpleaños.
No dejó ni un trocito de pastel intacto, durante todo el reportaje estuvo alegre, contento y disfrutando de su pastel que solo el sabe lo bueno que esta ya que no dejó ni un pedacito para nadie mas.
Aquí dejo estas fotos como prueba.